Ecología

Las ciudades deben pensar en los árboles como infraestructura de salud pública

Plantar árboles es una manera increíblemente barata y simple de mejorar el bienestar de las personas en una ciudad.

Respirar aire puro es el sueño de cualquier habitante de una gran ciudad, aunque le guste mucho el medio urbano. Y las calles arboladas, además de bonitas y agradables, son comprobadamente beneficiosas para la salud física y mental. Entonces, ¿por qué no incluirlas en los fondos de financiamiento de salud? Es lo que cuestiona a la organización The Nature Conservancy, que creó un documento donde explica y demuestra en cifras las razones por las que esto debe hacerse.

Un White Paper es una especie de guía, un documento oficial, que detalla un determinado problema, indicando causas, conceptos y, principalmente, soluciones para enfrentarlo. El documento tiene como base a Estados Unidos, donde se gasta menos de un tercio del 1% de los presupuestos municipales en plantación y mantenimiento de árboles y, como resultado, las ciudades norteamericanas pierden cuatro millones de árboles al año.

«Imagínese si hubiera una acción simple que los líderes de la ciudad pudieran tomar para reducir la obesidad y la depresión, mejorar la productividad, aumentar los resultados educativos y reducir la incidencia de asma y enfermedades cardíacas entre sus residentes. Los árboles urbanos ofrecen todos estos beneficios y mucho más «, afirma la organización.

Pero, sabemos, algunos sólo se convencen cuando los números entran en la jugada. Por eso, se estima que gastar sólo ocho dólares por persona, una vez al año, en promedio, en una ciudad americana podría suplir la brecha de financiación e impedir la pérdida de árboles urbanos y todos sus beneficios potenciales. Aunque el número no es una sugerencia de valor, muestra que la inversión no es imposible.

tree city photo

Inversión desigual

La inversión en la plantación de nuevos árboles -o incluso en cuidar de los que existen- es perpetuamente subfinanciada. A pesar de las evidencias, dice el informe, las ciudades están gastando menos en árboles que en las décadas anteriores.

Además, con mucha frecuencia, la presencia o ausencia de la naturaleza urbana está ligada al nivel de ingreso de un barrio, resultando en enormes desigualdades en la salud. En algunas ciudades estadounidenses, las expectativas de vida en diferentes barrios, ubicadas a pocos kilómetros de distancia, pueden diferir en hasta una década. No toda esta disparidad de salud está conectada a la cobertura arbórea, pero los investigadores están cada vez más seguros de que los barrios con menos árboles tienen peores resultados de salud, por lo que la desigualdad en el acceso a la naturaleza urbana empeora estos diferentes niveles de salud.

Cómo tener más árboles en la ciudad

El documento trae una serie de consejos que pueden ser aplicados por el poder público y privado. En la actualidad,

– Implementación de políticas para incentivar la siembra privada de árboles.

– Más intercambios municipales que faciliten la colaboración de varios departamentos -, como organismos de salud pública y agencias ambientales.

– Vincular el financiamiento de árboles y parques a metas y objetivos de salud.

– Invertir tiempo y esfuerzo en la educación de la población sobre los beneficios tangibles de la salud pública y el impacto económico de los árboles.

 

El estudio completo: https://www.nature.org/content/dam/tnc/nature/en/documents/Trees4Health_FINAL.pdf

Martín Reid

Apicultor, experto en sostenibilidad, apasionado por los huertos, el cultivo de alimentos orgánicos y las hierbas medicinales. Escribe para "El Horticultor" desde 2014.