Huerta comunitaria escolar producirá 900 kg de miel orgánica al año
La producción irá destinada a entidades sociales, además de reforzar la alimentación escolar de los 150 alumnos
Un proyecto que integra educación, tecnología y solidaridad tiene nuevos retos a partir de este mes. La huerta comunitaria cultivada por alumnos de la escuela técnica agrícola Nossa Senhora da Conceição, en Cachoeira do Sul, Brasil, que ya benefició a casi 5.000 personas en situación de vulnerabilidad social con más de tres toneladas de alimentos, entre hortalizas, verduras y hortalizas biofortificadas , ganó un meliponario. La expectativa es que los diez nidos de abejas nativas produzcan 900 kilos de miel para 2023. La producción se destinará a entidades sociales, además de reforzar la alimentación escolar de los 150 alumnos de la institución.
La iniciativa para la proliferación de colmenas, denominada ConnectBzzz, busca acercar a los estudiantes al manejo adecuado de las abejas nativas (sin aguijón), con la construcción de las abejas meliponarias y africanas. Se instalaron nidos de abejas Mandaçaia y Jataí. Además, los alumnos cuentan con equipos de protección como overoles, mascarillas, fumigadores y guantes para la manipulación y extracción de miel de las colmenas africanas.
El proyecto Cooperar & Crescer, que tiene una alianza con AgTech ConnectFARM, que brinda apoyo financiero y técnico, también cuenta con el proyecto Mesa Brasil, del SESC, que destina, entre las entidades de asistencia, alimentos biofortificados, con hasta tres veces más nutrientes que los comunes, cultivadas en el jardín comunitario. Las semillas son proporcionadas por la red Biofort de Embrapa. La acción en Rio Grande do Sul recrea un modelo exitoso en Brasil como alternativa viable para combatir la desnutrición y el hambre oculta.
tres toneladas de comida
La alianza para la ampliación del huerto comunitario en Cachoeira do Sul comenzó en junio de 2021. La primera entrega de alimentos biofortificados al proyecto Mesa Brasil se realizó en septiembre de ese año. Hasta septiembre de 2022, 20 entregas sumaron 3,06 toneladas de alimentos a 55 entidades de la región. Alrededor de 4.750 personas en situación de vulnerabilidad social se beneficiaron de las donaciones.
huerta biofortificada
Al inicio del proyecto, la huerta contaba con 0,3 hectáreas sembradas, lo que atendió la demanda de aproximadamente 150 alumnos de la escuela técnica agrícola. Con la entrada de ConnectFARM, el área de siembra aumentó a seis hectáreas y la capacidad de producción se triplicó. Como resultado, aproximadamente el 70% de la cosecha ahora se destina al proyecto Mesa Brasil de SESC.
“La asociación con ConnectFARM es una forma de ampliar el diálogo con la comunidad, mejorar aún más el aprendizaje, introducir nuevas tecnologías y también fomentar la solidaridad”, dice la directora de la escuela, Fátima Lamb. “El número de consultas aumentó mucho con la pandemia, por lo que alianzas como esta son importantes por la demanda y alimentos con valor nutricional adecuado para esta población”, destaca Débora Carvalho Martins, nutricionista del proyecto Mesa Brasil.
Las plántulas de hortalizas son financiadas por AgTech, mientras que las semillas de alimentos como maíz, frijol y yuca son donadas por la red Biofort de Embrapa. Alberga proyectos para reducir la desnutrición y garantizar una mayor seguridad alimentaria mediante el aumento de hierro, zinc y vitamina A, nutrientes importantes para la resistencia corporal y el desarrollo intelectual, en la dieta de la población más necesitada.
“El cruce genético natural nos permitió desarrollar boniatos, por ejemplo, con 10 veces más nutrientes. Así conseguimos combatir el hambre oculta, que es el hambre de quien come, pero come mal. Además, internamente vemos a nuestro equipo muy ilusionado por participar en proyectos como este, que es la primera gran ganancia. Ser parte de la comunidad con la que estamos directamente involucrados es de gran valor”, agrega Wellington Hoppe, coordinador de proyectos de ConnectFARM.
