Mujer usa cáscaras de coco desechadas para fabricar vajilla natural de excelente calidad
La empresa Thenga fue la encargada de realizar este proyecto, el cual en realidad ha llamado bastante la atención gracias a la calidad que han conseguido.
Lo cierto es que la cáscara de coco es un material bastante versátil, el cual puede ser utilizado de varias formas bastante interesantes al ser utilizadas como una materia prima bastante efectiva y positiva.
El primer detalle que debemos de tener en cuenta es que el simple hecho de evitar que las cáscaras de coco sean quemadas reduce considerablemente la contaminación. Otro detalle que llama la cuenta es que este proyecto fue impulsado por María Kuriakose, una joven que, junto con su empresa, Thenga, decidió realizar más de 8.000 productos para venderlos por todo el país.
María nos comenta: “Desde la infancia ha sido uno de mis sueños poder comenzar mi propio negocio, aunque no tenía idea de lo que podía hacer. Descubrí que los cocos son un cultivo bastante versátil, uno que en realidad se puede utilizar en todos lados. Cuando investigué más, entendí por qué algunas empresas los utilizan para hacer carbón activado, ya que de lo contrario son quemados como combustible. Antes, varios artesanos de Kerala utilizaban las cáscaras para hacer cucharones y así poder servir alimentos. Actualmente no cuentan con mucho valor y los artesanos que realizaban este oficio ahora son muchos menos”.
Con el fin de poder sustentar su compañía, María Kuriakose se encargo de gestionar algunas alianzas estrategias con distintos artesanos para trabajar en distintos productos que fueran derivados del coco. Asimismo, se le ha dado una orientación en lo referente a la escogencia de las conchas para conseguir el producto final.
“Conseguí aprender mucho para la fabricación de productos que aprovecharán la cáscara del coco y los cuales necesitaban de cierta maquinaria especial. Esto sobre todo para poder fregar la parte exterior e interior de la cáscara, consiguiendo darle un acabado suave”, comentó María.
Para conseguir dicha versatilidad en el método de fabricación que estaba utilizando, el papá de María (qué es ingeniero de profesión), le ayudó a poder hacer la máquina a un costo mucho menor, pero con un funcionamiento de alta calidad. Utilizando el dinero que consiguió ahorrar en la fabricación de la máquina, invirtió en gestión ecológica.
Además de obtener la materia prima, se utilizan molinos para poder extraer el aceite del grano maduro del coco.
“En realidad pensé en utilizar agua de coco y las cáscaras antes de que me decidiera por las cáscaras. Una pequeña fracción de utilizaba para poder fabricar carbón activado, pero en realidad la gran mayoría era quemada como como combustible en los molinos de aceite. Todas las pares del coco son útiles, pero la producción de elementos de valor agregado con las cáscaras de coco es algo limitada aquí, a diferencia de otros países del sudeste asiático”, afirmo María.
Para la fabricación de este tipo de vajilla no se utilizaron ningún tipo de sustancias artificiales. “Conseguimos capacitar a los artesanos para que pudieran mantener sus productos 100% naturales, motivo por el que utilizan el aceite del coco en lugar de utilizar barniz para darle la capa fina de esmalte al finalizar”, concluyó María.
