Propiedades del Alcaucil o Alcachofa
La alcachofa o Alcaucil (Cynara scolymus) es un vegetal de fácil digestión y bien tolerado. Es un alimento-medicina. Sus componentes lo hacen de gran utilidad en la lucha contra el colesterol. Desintoxica el hígado y aumenta la producción de bilis por su función colagoga (la bilis secretada después de la ingesta de alcachofa, es menos densa, permitiendo la descongestión del hígado).
Es originario de África. Tiene tallos blanquecinos, hojas lanceoladas grandes y carnosas de color verde. Puede alcanzar hasta 80 cm de altura. Prefiere suelos arcillosos, profundos, fértiles y bien drenados. Se multiplican por brotes, prefiriendo clima donde la temperatura oscila entre 5 y 30°c. La siembra debe hacerse en la estación lluviosa, a través de las plántulas obtenidas por corte de brotes que nacen alrededor de la raíz.
El té de las hojas es un tónico, preventivo y curativo de las enfermedades del hígado. Es diurético y útil en la lucha contra el reumatismo, diabetes, arteriosclerosis, colesterol, hipertensión, tiroides, trastornos pulmonares, enfermedades de la piel y asma.
El «corazón» del alcaucil o alcachofa tierna puede utilizarse en ensaladas, sazonados con aceite de oliva, sal rosada y limón. Lo ideal es cocerlo al vapor, para conservar sus propiedades. Puede también ser cocido al horno o en la parrilla. En este caso, no se deben cortar las hojas.
Algunos de los ingredientes activos de la alcachofa son los flavonoides, taninos, potasio, sodio, calcio, hierro, magnesio, ácidos (caféoico fosfórico, salicílico), pectina, inulina, glucósidos, esteroides y terpenos.