Alfalfa: Beneficios y Propiedades Medicinales
La Alfalfa (Medicago sativa) es una planta comúnmente utilizada como pastura para animales, con muchas aplicaciones medicinales, pertenece a la familia de las leguminosas.
Beneficios de la alfalfa
La raíz de la alfalfa puede ser pelada, triturada y secada para ser utilizada como un cepillo de dientes natural, ya que la planta tiene propiedades medicinales para combatir el mal aliento.
La alfalfa, además de ser rica en clorofila y calcio, tiene vitamina C, vitamina K, ácido fólico, ácido fenólico, cobre, fósforo, manganeso, hierro, zinc, flúor y varias otras sustancias. Tiene propiedades antioxidantes y ayuda reducir el colesterol, reduciendo el riesgo de aterosclerosis. El ácido fenólico ayuda a prevenir la formación de coágulos de sangre, reducir la incidencia de enfermedades cardiovasculares. Los carotenoides previenen la aparición de enfermedades degenerativas oculares. También se sabe que los carotenoides pueden ayudar a prevenir la aparición de algunos cánceres y enfermedades del corazón.
El efecto diurético de la alfalfa impide que el cuerpo retenga líquidos en abundancia. La Alfalfa, por ser un alimento alcalino rico en minerales como el magnesio, potasio, hierro, zinc y calcio, ayuda a eliminar el exceso de sodio en el cuerpo, previniendo la aparición de Gota. Ayuda a equilibrar el pH del cuerpo, evitando la acidificación de la sangre. Contiene saponina que en el intestino, actúa como un emulsionante de grasa, causando que el cuerpo no absorba esta grasa, y que la misma sea eliminada del cuerpo.
La alfalfa, alta en proteínas, es un buena contra el raquitismo. Es eficaz en el tratamiento de la anemia, la deficiencia de hierro en el cuerpo. Ayuda a proteger de las hemorragias. El té de alfalfa recalcifica rápido los huesos, además de ser un tranquilizante natural. También combate el escorbuto (enfermedad causada por deficiencia de vitamina C en el cuerpo), falta de apetito, indigestión, úlceras, cistitis, nerviosas, reumatismo y artritis. Las flores y las hojas pueden ser comidas en ensalada o cocinadas en la sartén. El brote puede ser cocinado y luego comido en forma de ensalada o añadido a las sopas. Recordamos que siempre preferimos utilizar la planta cruda para obtener todas sus propiedades medicinales.
Cómo hacer té de alfalfa
El té de alfalfa debe hacerse siempre con la hoja seca, secada a la sombra, de esta forma no se marchitan ni pierden sus propiedades. Beber un vaso de té de alfalfa cuatro días a la semana antes del almuerzo.
Contraindicaciones y efectos secundarios de la alfalfa
El consumo de alfalfa es considerado muy seguro para los seres humanos y animales, pero uno debe evitar ingerir grandes cantidades de brotes, porque contienen alcaloides. Las hojas y las flores no tienen ningún tipo de contraindicaciones.
Historia y curiosidades
Su nombre «alfalfa» es de origen árabe, derivada de al-fac-facah, que significa «el padre de todos los alimentos». El nombre del género, Medicago, se refiere a África del norte, donde muchos creen que se encuentra el origen de esta planta. La Alfalfa siempre ha sido de gran importancia para los árabes, quienes alimentaban sus caballos durante grandes travesías por los desiertos de África con este pasto nutritivo.
Donde la alfalfa crece salvaje y abundante, la tierra en cuestión es muy rica en minerales. Muchos agricultores cultivan alfalfa en sus propiedades para enriquecer la tierra, que pasa a tener gran fijación de nitrógeno. Cuando las vacas son alimentadas a base de alfalfa, tienden a aumentar la producción de leche. También se explota comercialmente para la extracción de la clorofila.